Tarta de galletas y natillas: receta fácil
¡Sorprende a todos con una tarta de galletas y natillas insuperable! Con esta receta fácil y rápida, triunfarás en cualquier reunión familiar. No importa tu nivel en la cocina, esta tarta se convertirá en tu postre estrella.
Para esos días en los que buscas un dulce sin complicaciones, esta tarta es tu salvación. Y si eres un aventurero de los sabores, te encantará explorar las natillas de turrón, un giro exquisito para tu paladar.
La tarta de galletas y natillas es perfecta para celebrar cualquier momento especial. Y si, como a mí, te apasiona descubrir recetas rápidas y deliciosas, no puedes perderte la ensalada de lentejas o la increíble bechamel para croquetas, ¡te sorprenderán!
Por qué te encantará esta tarta de galletas y natillas
- Un viaje a la infancia - Al primer bocado, te transportarás a esos dulces momentos de tu niñez. La combinación de galletas crujientes y natillas suaves es un homenaje a los clásicos postres de siempre.
- Comodidad en la cocina - Olvídate de complicaciones. Esta receta es tan sencilla que podrás disfrutar del proceso tanto como del resultado. Y lo mejor, sin necesidad de ser un experto repostero.
- Perfecta para cualquier ocasión - Ya sea un cumpleaños, una reunión familiar o simplemente porque te apetece, esta tarta es la elección ideal. Su sabor y textura nunca decepcionan y siempre dejan con ganas de más.
Tus ingredientes imprescindibles
Para que triunfes con esta tarta de galletas y natillas, te contaré los secretos de los ingredientes que necesitas. Empecemos por la base, esa parte crujiente que todos adoran. Aunque las galletas María son la opción tradicional, ¿por qué no dar rienda suelta a tu creatividad y probar con otras que te inspiren?
- Galletas - Escoge galletas María para un sabor que nos lleva de vuelta a la infancia, o atrévete con otras variedades que te gusten. Lo importante es que sean de buena calidad para conseguir esa base crujiente y dorada que buscamos.
- Mantequilla - La mantequilla sin sal es nuestra aliada para que las galletas se unan en una base compacta y deliciosa. ¿Mi consejo? Déjala a temperatura ambiente un rato antes de usarla, así se mezclará mejor.
- Leche - La leche entera dará a las natillas esa textura cremosa y rica que nos encanta. Pero si estás pensando en algo más ligero, la leche desnatada también funciona de maravilla.
- Azúcar - El dulzor justo es clave, así que ajusta la cantidad de azúcar a tu gusto. A mí me gusta que no esté demasiado dulce, para apreciar todos los sabores.
- Maicena - Este es el mago del espesamiento. Una pizca de maicena y tus natillas tendrán la consistencia perfecta.
- Yemas de huevo - Son el toque de oro para unas natillas suaves y con un color amarillo intenso. Siempre frescas, por favor.
- Vainilla - Ya sea extracto o vaina, la vainilla es ese susurro de sabor que hace que las natillas sean inolvidables. Yo prefiero la vaina, porque esos puntitos de sabor son un pequeño lujo en cada bocado.
Con estos ingredientes en tu poder, estás a un paso de conquistar paladares. ¡Vamos allá!
¡Antes de empezar a preparar nuestra deliciosa tarta de galletas y natillas, vamos a asegurarnos de tener todo listo! En primer lugar, elegiremos las galletas perfectas para la base. Personalmente, me encantan las galletas María, ya que tienen un sabor neutro y una textura ideal para triturar. Pero si quieres darle un toque diferente, ¡no dudes en experimentar con otras variedades!
Una vez tengamos las galletas, pasaremos a preparar el molde. Engrásalo ligeramente con mantequilla o spray desmoldante para garantizar que la tarta se deslice fácilmente una vez esté lista. Por último, precalentaremos el horno a 180°C para que esté listo cuando tengamos la base de galletas lista para hornear.
Recuerda que estos pasos previos son fundamentales para el éxito de nuestra tarta. ¡Así que vamos a poner todo nuestro cariño en ellos!
¡Vamos a empezar con la base de galleta, que es la parte más sencilla de esta receta! Lo primero que tienes que hacer es triturar las galletas hasta que queden bien molidas. Puedes usar una procesadora de alimentos o simplemente meterlas en una bolsa de plástico y aplastarlas con un rodillo o un vaso.
Una vez que tengas las galletas trituradas, añade la mantequilla derretida y mezcla bien hasta que esté todo bien integrado. ¡Te recomiendo que uses mantequilla sin sal, ya que le dará un sabor más suave a la base!
A continuación, vierte la mezcla de galletas y mantequilla en un molde desmontable y presiona bien con los dedos para que quede bien compacta. ¡No te preocupes si no queda perfectamente lisa, le dará un toque casero a la tarta!
Por último, hornea la base de galleta durante 10 minutos a 180°C. ¡Saldrá del horno doradita y crujiente, y estará lista para recibir el delicioso relleno de natillas!
Si quieres darle un toque especial a tu tarta, puedes añadir un poco de canela o coco rallado a la mezcla de galletas y mantequilla. También puedes usar galletas de chocolate o de vainilla en lugar de las galletas María para variar el sabor.
¡Vamos a preparar el delicioso relleno de natillas para nuestra tarta! Es facilísimo hacerlo y solo necesitas unos ingredientes básicos: leche, azúcar, maicena, yemas de huevo y vainilla. Yo siempre uso leche entera para mis natillas porque le da una textura más cremosa, pero si prefieres una versión más ligera, puedes usar leche desnatada sin problema.
Comienza calentando la leche con la vainilla en un cazo a fuego medio. Mientras tanto, mezcla el azúcar, la maicena y las yemas de huevo en un bol hasta obtener una pasta suave. Esta mezcla es la clave para que nuestras natillas queden perfectas, así que no te preocupes si se te forma algún grumo, se disolverá cuando añadas la leche.
Cuando la leche esté caliente, añade poco a poco a la mezcla de huevo, sin dejar de remover, para temperarlos. Esto evitará que se cuajen las yemas al mezclarlas con la leche caliente. Luego, vierte la mezcla de huevo y leche de vuelta al cazo y cocina a fuego medio-bajo durante unos minutos, hasta que espese. Recuerda remover constantemente para evitar que se pegue al fondo del cazo.
Una vez que tengas tu relleno de natillas listo, déjalo enfriar antes de usar en la tarta. Puedes añadirle un poco más de azúcar o vainilla al gusto, ¡o incluso algún otro sabor que te apetezca!
¡Ya estamos listos para montar nuestra deliciosa tarta de galletas y natillas! Personalmente, siempre disfruto mucho de este paso, ya que es cuando la tarta empieza a tomar forma y podemos empezar a imaginar cómo quedará.
Empezaremos vertiendo el relleno de natillas que preparamos anteriormente sobre nuestra base de galleta. Asegúrate de extenderlo uniformemente para obtener una capa lisa y homogénea. Recuerda que la natillas debe cubrir completamente la base de galleta para que la tarta quede perfecta.
Una vez que hayamos cubierto la base de galleta con el relleno de natillas, llega el momento de la decoración. Podemos usar galletas trituradas o caramelo rallado para darle un toque especial a nuestra tarta. ¡O incluso puedes dejar volar tu creatividad y añadir tus propias ideas!
¡Enfriado y presentación perfectos para tu tarta de galletas y natillas!
¡Ya casi está lista tu deliciosa tarta de galletas y natillas! Pero antes de disfrutarla, hay un paso muy importante: el enfriado.
Recuerdo cuando preparé esta tarta por primera vez para una reunión familiar. Todos estaban impacientes por probarla, así que no podía permitirme el lujo de que la textura no fuera perfecta.
Guarda la tarta en la nevera durante al menos 2 horas antes de servirla. Esto permitirá que las natillas se asienten y la base de galletas se compacte, lo que hará que cada bocado sea una delicia.
Cuando esté lista para servir, puedes decorarla con galletas trituradas o caramelo rallado para darle un toque especial. ¡Tus invitados quedarán encantados!
Si tienes ganas de darle un extra de sabor, puedes acompañarla con nata montada o helado de vainilla. ¡Una combinación irresistible!
Receta
Tarta de galletas y natillas
Tiempo de preparación: 45 minutos + enfriado
Una deliciosa tarta de galletas y natillas que conquistará a todos tus invitados en pocos pasos.
Ingredientes
- 250 g de galletas (María o de tu elección)
- 125 g de mantequilla sin sal
- 500 ml de leche entera
- 100 g de azúcar
- 2 cucharadas de maicena
- 4 yemas de huevo
- 1 vaina de vainilla o 1 cucharadita de extracto de vainilla
Instrucciones paso a paso
- Precalienta el horno a 180°C. Tritura las galletas hasta obtener un polvo fino y mézclalo con la mantequilla derretida. Presiona esta mezcla en el fondo de un molde desmontable y hornea durante 10 minutos. Déjalo enfriar.
- Mientras tanto, prepara las natillas. Calienta la leche con la vainilla (si usas una vaina, ábrela por la mitad y raspa las semillas). En un bol, mezcla el azúcar, la maicena y las yemas de huevo hasta que estén bien integradas.
- Vierte poco a poco la leche caliente sobre la mezcla de yemas, sin dejar de remover. Cuando esté todo bien incorporado, vuelve a verter la mezcla en la cazuela y cocina a fuego medio, sin dejar de remover, hasta que espese.
- Vierte las natillas sobre la base de galletas y deja enfriar a temperatura ambiente. Después, refrigera la tarta durante al menos 3 horas o hasta que esté completamente firme.
Notas:
- Puedes decorar la tarta con una capa de chocolate derretido o nata montada antes de servir.
- Si utilizas extracto de vainilla en lugar de una vaina, añádelo a la mezcla de yemas y azúcar.
- Para una versión más ligera, puedes usar leche desnatada en lugar de leche entera.